II)
MÚSICA
Canta, canta, corazón mío
que el canto afloja los nudos
que la tristeza deja en el cuerpo
Baila, baila, corazón mío
que el baile desata los nudos
del pensamiento y une
Algo indeciblemente dulce
invade mi pecho con “La Traviata”
Y se afianza con la fuerza de la voz
y los ondulantes finales
Abandónate, entrégate, fúndete corazón
con la eterna música
Corta el silencio sagrado
con tu propio canto
!Ah! cómo une por dentro
y por fuera esa música
Bendita unidad, hazte más larga
Desbórdate, trasciéndeme,
acúname, vuélveme a esa voz arrulladora
al lado tibio de la cama.